Una vez...

Hace tiempo que me ronda por la cabeza la idea de contar antiguas anécdotas en el blog, cosas que me hayan pasado antes de crearlo, pero después de darle muchas vueltas lo cierto es que no es una tarea tan fácil como puede ser contar lo que te ocurre día a día. 

Yo con ¿3, 4 años? No lo sé...

El primer problema que se me presenta es como plantear estas entradas... quizás resumir épocas enteras de mi vida o quizás contar simplemente pequeñas anécdotas ocurridas en días concretos. La primera opción puede parecer más fácil, pero me resulta demasiado genérica, poco concisa para poder hacer algo divertido y ameno, que a fin de cuentas mi vida no es tan interesante para ser contada/leida ni yo soy un gran escritor capaz de sacar punta a cada situación.

Luego está también el problema de que muchas cosas vistas desde la perspectiva y desde la distancia quizás carecen ya de interés. Y eso sin contar como muchos recuerdos pueden verse alterados con el paso del tiempo. Pero claro es que una cosa que seguramente me pareciera digna de contar cuando tenía 15 años, ahora no es más que una "chorrada de adolescentes" y sinceramente hasta a mi mismo me resulta difícil situarme en perspectiva y verle el interés a esas historias.

Otra cuestión muy importante: la gente. Podría hablar de muchas historias graciosas o divertidas que le ha pasado a mucha gente a mi alrededor(de hecho aquí mismo en el erasmus) ¿pero qué pensarían esas personas de mí? Seguramente nunca lleguen a leerlo ni entren nunca en este blog, y no, omitir nombres no es una opción porque muchas historias son conocidas por más personas, y al final todos sabríamos de que estoy hablando, además de que hay historias que quizás servirían para el confesionario de gran hermano pero yo no voy a contar aquí por simple respeto.

Un problema menor pero también a tener en cuenta, es que resulta difícil ilustrar algunas cosas que han pasado hace muchos, muchos años... no es que sea algo grave, pero siempre dice más una imagen que mil palabras.

Dicho todo esto, lo verdaderamente cierto es que no se me ocurría nada bastante interesante que pudiera contar y que además aporte algo sustancial al blog, o quizás es que no lo he reflexionado suficientemente, no lo sé. Por lo pronto me ha dado para escribir una entrada en la que supongo que esperabais que os contara algo más, pero es que en este caso lo que vengo es a preguntaros... ¿cómo lo haríais vosotros? ¿Lo haríais de hecho? ¿o lo que pasó, pasó y no hay que darle más vueltas?